lunes, 19 de diciembre de 2011

Pagar por visitar Somiedo




Hoy aparece en el periódico La Nueva España, un artículo de D. Jesús Arango autor del libro "Somiedo, de la trashumancia al Parque Natural". En este artículo se realiza una clara y argumentada exposición de la realidad demográfica y del futuro de espacios naturales asturianos del que el más destacado parece Somiedo.


Estoy de acuerdo con prácticamente todo el análisis y evidentemente con la necesidad de búsqueda de soluciones para evitar la sangría demográfica y poder mantener la viabilidad de un territorio con los evidentes valores del Parque de Somiedo.


Pero no puedo discrepar más con alguna de las soluciones.

De acuerdo con mejorar la telecomunicaciones, especialmente a los vecinos (banda ancha, telefonía, etc.)

Pero mejorar las comunicaciones por carretera para mejorar el acceso de turistas es una falacia. Los turistas que van (vamos) lo hacen precisamente porque no les importa esa dificultad de desplazamiento para acceder a los valores del Parque. Cierto que no se puede condenar a los habitantes al aislamiento, pero entiendo que las dificultades de desplazamiento deberían ser compensadas con medidas que hasta ahora condenan aún más a la despoblación: el desplazamiento de los niños a Belmonte para Secundaria, con el desarraigo que acabará produciendo, la falta de asistencia médica permanente, etc. son servicios básicos que salen muy caros pero que son una compensación lógica a una peor comunicación.


Mejorar la carretera a costa de la destrucción de bosques, riberas, taludes con especies endémicas, etc. no sé si compensa. O que la vía principal de comunicación se transforme en una vía rápida para los camiones de carga que vuelven de las centrales térmicas de Villablino.


Y por supuesto la medida de pagar por visitar Somiedo me parece un despropósito. Si se quiere compensar al Ayuntamiento y vecinos de Somiedo por su labor de conservación, habría que tener en cuenta otros factores como el hecho de haber recibido hasta ahora cuantiosas inversiones sin final (léase el área industrial de Veigas hecho para una empresa de aguas de la que nunca más se supo).


Además no creo que sea justo hacer pagar precisamente a aquellos que contribuyen al mantenimiento del Parque, es decir a los turistas. Somiedo con sus valores naturales es de todos, de los que lo visitan y de los que no lo visitan, pues también ellos reciben de manera indirecta sus beneficios, en forma de biodiversidad, agua, oxígeno, ganado de calidad..., así que lo ideal es que paguemos todos también de manera indirecta.


¿Cómo? Pues revirtiendo el IVA que se genere en Somiedo, u otros impuestos en la propia sociedad somedana, por ejemplo. Favoreciendo entonces la creación de cultura emprendedora en áreas con dificultades orográficas, es decir la creación de empresas sostenibles con mejoras fiscales.


Algo distinto de la ecotasa que grava de nuevo a quienes precisamente tratan de preservar su entorno conociéndolo.


(Además ¿quién le va a poner puertas al campo?)


domingo, 18 de diciembre de 2011

El "matu" del matorral


Tengo la sensación, y de ahí el títulín de la entrada, de que escribiendo esto me estoy metiendo en un "matu". Pero ya no puedo evitar comentar algo acerca de la matorralización de Asturies.


Las últimas décadas han supuesto una despoblación del campo asturiano que llega a niveles de desertización demográfica en buena parte de los concejos rurales. Los cambios que ello ha supuesto son inmensos, y los retos a los que nos enfrentamos con ello también lo son.

Pero no podemos partir de la idea de que los habitantes del medio rural son los "jardineros del paisaje" y aquellos que van a hacer pervivir la naturaleza de Asturies.


Porque si hay algún caso en que el hombre, sea cual sea su lugar y forma de obtención de recursos, ha buscado la protección del medio ambiente en alguna de sus formas, ha sido sólo por interés o por casualidad.
Uso tradicional del monte en Asturies por parte de los jardineros del paisaje. Quemar para tener nuevas superficies de pasto y regenerar las antiguas. Hoy eso, desde lo urbano lo vemos inviable. ¿Y alternativas?





Así que en Asturias no hay jardineros del paisaje, hay agricultores, ganaderos, madereros... pero no tratan de proteger el medio ambiente porque sí o con un fin que no sea el propio interés, (que en el fondo es lo lógico y que hacemos todos).

La matorralización de Asturias no es sólo una consecuencia del abandono del campo y las técnicas de uso tradicionales (lo cual es una desgracia etnográfica, cultural y social) si no del manejo tradicional, o habitual en Asturias, que ha consistido en talar, roturar, incendiar, desbrozar, pastorear..., lo cual ha conducido a un grado de deforestación de tal calibre que ha modificado por completo el paisaje.

Típico paisaje de uso ganadero en el que los bosques han sido sustituidos por pasto y matorral desde hace miles de años



Y cuando se ha terminado ese uso, el paso siguiente es el matorral. Si el suelo está demasiado degradado, sobre todo por incendios, el avance será lento, tan lento que puede que no vuelva en muchos cientos de años al estado original de bosque atlántico (si el cambio climático lo permitiese)


Por cierto, si hay matorral no es por culpa sólo del ser humano, el matorral existe como parte integrante del medio natural de Asturies. Hay zonas en las que es el ecosistema climax.


La matorralización es una desgracia por la pérdida de biodiversidad que supone, puesto que el hombre con el uso de la agricultura ha modificado los equilibrios y favorecido los ecotonos, es decir los límites entre ecosistemas, lo que por definición aumenta la biodiversidad de espacios y especies (generalmente a costa de una disminución del número de individuos de cada población).


La invasión del campo por las necesidades urbanas desplaza no sólo a las especies naturales, si no también a los usos tradicionales e incluso a la estima por la tierra que tienen sus habitantes "¿A quien le importa esto? ¿Por qué yo no puedo quemar el monte como siempre si vienen de fuera a imponerme molinos que yo no pido?"

La matorralización es una desgracia en cuanto que la hacemos volver al punto de partida cada cierto tiempo, bien sea para crear pastos de baja calidad o por quemar el monte una y otra vez. No se eliminan matorrales con desbroces, pues eso sólo retrasa la nueva aparición del matorral en un suelo cada vez más pobre. Ni tampoco invirtiendo cantidades astronómicas de dinero en subvenciones o roturaciones. Ni declarando que es un medio tan pobre que no pasa nada si cultivamos especies urbanitas como los aerogeneradores.

Se eliminan de dos formas: cambiando el monocultivo de vacas o especies forestales de crecimiento rápido, por un mosaico de espacios y especies que aprovechen el campo y sus recursos, o dejando que la naturaleza siga su camino hacia mayor complejidad del ecosistema de manera natural, teniendo claro que en ese caso deberemos compensar la pérdida o cambio de actividad de aquellos que ahora habitan el campo.



Así que es mejor tomar decisiones a largo plazo, cosa que pocas veces hacemos o hacen nuestros políticos, teniendo claro a dónde queremos que llegue nuestra naturaleza. Con decisiones a corto plazo seguiremos mintiéndonos y promoviendo incendios y despoblamiento.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Ahora ya es temporal




Esto ya no es mar de fondo. Es de fondo, de frente y de costado. Y aún no soplaba el viento con intensidad.




De todas formas hay gente bastante insensata. En Salinas, donde estuve esta tarde, la gente seguía corriendo por la arena y paseando y jugando con sus perros. Y el mar no estaba tan lejos como algunos pensaban. El chaval de la foto tuvo que correr bastante para llegar seco a la rampa, y una señora a los pocos minutos fue arrastrada por la resaca en la propia rampa de L'Espartal. Si no se agarra con fuerza a la barandilla, se la lleva porque el agua se arremolinaba a su alrededor casi hasta la altura del pecho. Aún así se llevó un buen susto y un buen golpe.






Cámaras había un montón, pero el viento movía trípodes y barandillas de forma que pocas fotos saldrán sin movimiento.






Espero que os guste el mar en movimiento.


martes, 13 de diciembre de 2011

Mar de fondo


Situación marítima complicada, y cuando se hicieron las fotos no llegaba aún a olas de 4 metros de altura.



Si estos días continúa aumentando y llega a los 6 o 7 metros será un espectáculo tremendo y un verdadero peligro.

Por cierto, es la costa de Llanes. (Paisaje Protegido de la Costa Oriental)

lunes, 12 de diciembre de 2011

Anillada


Aunque para muchos aficionados a la ornitología ver pájaros anillados no es extraño, si no algo habitual, reconozco que para mí aunque suelo fijarme bastante, no me resulta nada común.

Así que cuando el otro día (el jueves) paseando por el Parque de Isabel la Católica, me encontré con una gaviota que llevaba dos anillas: una metálica y otra plástica de mayor tamaño y con un código alfabético y de color; en concreto letras naranja sobre fondo azul oscuro.


Esperando haber encontrado algo interesante me puse a rebuscar en internet hasta que con algunas dificultades fui descubriendo que no hay una verdadera base de datos común para el anillamiento.

Sorprendentemente no hay tampoco un patrón común de anillamiento. Ni siquiera hay una constancia oficial de quién hace o deshace en el anillamiento.

Incluso saber quién anilla y para qué sirvió, depende finalmente de la buena voluntad del propio anillador.

Algunos de ellos ya indican que ni siquiera responden si envías información acerca de aves que han anillado.

Todo esto me dejó bastante descolocado pero continué rebuscando hasta que encontré el origen de la anilla de mi gaviota una Larus fuscus (gaviota sombría) anillada en 2005 en Gloucestershire, Inglaterra. Su anillador es Peter Stewart del Severn Estuary Gull Group, un auténtico especialista en estas aves.


Muy interesante todo el proceso y muy interesante saber que las gaviotas que vemos a nuestro alrededor pertenecen a una metapoblación que abarca al menos todo el Cantábrico y probablemente más allá de la Islas Británicas.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Vale, aceptamos "normal" como animal de compañía.



Puede que el intento de chiste del título suene extraño, pero hay cosas que aún son más extrañas y que seguramente tendrán una explicación lógica, aunque yo y mi limitado intelecto no se la encontremos.


Estos días de fiesta en la playa de la Espasa me encontré con un espectáculo natural de lo más inesperado. Al pie del chiringuito, donde la duna ya ha dejado de serlo y se ha llenado de un césped insulso, se han plantado columpios y artilugios para niños, una ducha nueva y en la parte de atrás una tirolina infantil.



Es extraordinario porque ese pequeño trozo de duna casi irreconocible es el único territorio de Asturies, junto con una zona de la cercana playa de la Vega, donde medra una de las pocas plantas que en Asturies han merecido el dudoso honor de considerarse "en peligro de extinción" según la normativa actual.


Se trata de la Linaria supina subesp. maritima, también llamada Mosquita dorada.



Es casi inverosimil que esa planta pequeña y poco vistosa, sobreviva año tras año al trasiego de turistas, niños, perros, toallas, meriendas, cometas y todo lo que una playa pueda ofrecer en la masificada costa asturiana en verano.



Siguiendo las guías botánicas observé este verano que la mosquita dorada había ampliado su floración este año al mes de agosto, pues en varias aparece como de floración en junio y julio.


Allí debajo de las sombrillas y toallas, pisoteadas pero aparentemente no muy destrozadas había unas decenas de inflorescencias a mediados de agosto, justo cuando aparecía por la desembocadura del río Espasa un correlimos pectoral muy agradecido a la fotografía.


Floración tardía. Interesante pero nada excepcional.


Ahora bien, esta semana, en pleno Diciembre, había una floración de Linaria de más de un centenar de ejmplares. Y eso sí que es raro.



Tal vez sea una adaptación de las plantas a la ausencia de pisoteo (aunque tampoco hay polinizadores así que no creo que compense el gasto), tal vez con la ingente acumulación de nitratos en la zona, producto de los más variados desechos humanos, se permita el lujo de poder florecer cuando le dé la gana.


O tal vez sea producto del más raro de los otoños y comienzo de invierno que recuerdo, o sea del cambio climático que gracias a nuestros gobiernos, en Durban dejará por fin de existir.



No lo sé, quizá es que esta sea su época de floración y yo no la sabía, pero vamos, que "normal", lo que se dice "normal", no es.

martes, 6 de diciembre de 2011

Colimbo en Luarca




Hoy martes día de la Constitución estuve de excursión familiar por Luarca. Siempre que voy hay algo interesante en el río Negro o en el puerto. Y hoy no fue excepción.

Cerca de la rula, en el puerto deportivo estaba buceando y cogiendo cangrejos sin parar un ejemplar de colimbo grande (Gavia immer).




A los pescadores que estaban por allí no les estaba haciendo mucha gracia porque les espantaba la pesca, pero claro, tampoco estaba cogiendo peces, así que protestaron un poco pero nada más. Yo en cambio estaba encantado subido a un pantalán viendo como entraba a coger cangrejos una y otra vez.


Un espectáculo extraordinario.







En las fotos, algunas parecen tener el agua roja, pero es sólo el reflejo del color de los barcos amarrados alrededor.



viernes, 25 de noviembre de 2011

En la playa

Un par de fotos de un chorlitejo grande y un correlimos zarapitín en la playa de Bañugues.

Aquí el correlimos zarapitín




Acostumbrado a playas como Salinas o Arnao, donde ver limícolas no es excepcional pero tampoco algo habitual, hace apenas un año redescubrí Bañugues y con ello un lugar fantástico para la observación de aves, no sólo en el paso, que ya todos conocen por la entrada de aves raras, si no también en invernada, cuando quedan sedimentadas especies más habituales pero que permiten una observación detenida y pasar tardes agradables. Es de agradecer trabajos como el blog Aves en Gozón con el que te pones al día en un momento de lo nuevo y lo común, que a veces es aún más interesante y por lo que merece la pena revisitar Bañugues (y su entorno)


Chorlitejo muy tranquilo mientras le fotgrafiaba, de hecho se llegó a dormir.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Un tocho 23 carbayos

En Santalla de Ozcos aprendí más cosas que lo mucho que nos perdemos en el occidente de Asturies. Aprendí que tenemos un buen ejemplo, supongo que uno de tantos, de cómo el hombre provoca su propia ruina por no saber detenerse a tiempo, o por no saber o no querer gestionar bien los recursos disponibles.

Buena parte del territorio de Taramundi, Salime, los Oscos y hacia Galicia, Fonsagrada fue hasta principio del siglo XX, tierra de ferrerías.

Ferrería de Mazonovo

Aprovecharon bien los recursos disponibles: hierro, agua y bosques. Pero los aprovecharon hasta matar la gallina de los huevos de hierro.

La tierra daba hierro pero la proporción era baja y requería un trabajo importante en las fundiciones o ferrerías artesanales hasta obtener el metal en forma de bloques de hierro puro de unos treinta kilos de peso que llamaban tochos.

Los tochos eran trabajados en piezas más pequeñas, en láminas, alambres, varillas, etc. en los mazos cuya fuerza motriz era el agua acumulada en pequeñas presas, los banzaos.

Con esas varillas y láminas trabajaban en las casas, en pequeñas fraguas, fabricando utensilios más modestos tanto para tareas domésticas, como para la venta ambulante con la que complementar los escasos ingresos de las familias.


Los más famosos de esos utensilios fueron y siguen siendo las navajas.


Pero el quiz de la cuestión está en el combustible. Y en esto los Oscos siguieron los pasos de la isla de Pascua (Rapa Nui) en una cuestión medioambiental básica: explotaron los recursos naturales hasta agotarlos. Y en los Oscos una vez agotados cuando la competencia con otras formas ya más modernas de siderurgia acabó dándole la puntilla a la industria artesanal del hierro, allí sólo quedó una tierra empobrecida y olvidada.


Y todo esto por la tala indiscriminada de todo tipo de árboles que llevó a la desaparición de los bosques y a la pérdida de sus recursos.

Porque las fraguas familiares utilizaban como combustible raices de brezo, pero las ferrerías, las fundiciones utilizaban madera de roble carbayo. Y obtener un sólo tocho de treinta kilos de hierro requería talar y quemar 23 robles de gran tamaño.

¡23 robles!

Poco a poco, con la proliferación de las ferrerías, la madera se hizo cada vez más difícil de obtener, y los suelos más pobres. Cada vez estaba más lejos el combustible y llegó un momento que no resultaba rentable.

Así que ni hierro, ni bosques, ni riqueza, ni gente. Y el paisaje de los Oscos cambió para siempre, y aún hoy podemos observarlo a pesar de que la tierra trata de restañar las cicatrices.


Las imágenes están tomadas en el muy recomendable mazo de Mazonovo, muy cerca de Santalla de Oscos y estupendamente explicado por el actual ferreiro Frederick.




Tronco retorcido de haya, no de roble, pero con el mismo origen, cortas selectivas de ramas para obtener madera, combustible. Pero este modo de corta no elimina el árbol, lo desmocha y lo deja crecer. Un método más respetuoso con la sostenibilidad que la tala y quema.



miércoles, 16 de noviembre de 2011

29 céntimos de euro

Si divido 286.000 euros entre aproximadamente 1.000.000 de asturianos, me salen 0,286 € por asturiano, o sea 29 céntimos de euro y me sobra pasta para invitar.


Ese es el precio que no está dispuesto a pagar el Gobiernín para proteger uno de los espacios naturales más emblemáticos de Asturias, por ley espacio protegido, por ley Reserva, por ley, zona de reserva integral, por ley....papel mojado.


Entiendo al propietario, si quiere sacarle beneficio a su contrato. Me parece una canallada, pero lo entiendo. Ahora bien si es un espacio protegido, es de todos, y si ese es el valor y es el valor del futuro, pues toca pagar, y se paga.


Algo habrá que hacer en adelante para que no se produzca la situación, pero ahora se paga y salvamos el futuro. Quizá alguno piense que es un mal precedente. Yo creo que al contrario, creo que todos debemos ser conocedores y corresponsables del futuro de nuestro medio ambiente. Los bosques, los mejores bosques de Asturias ¿valen eso? ¿valen más? ¿no valen nada? ¿estamos dispuestos a pagar por ello?


Y atención al precedente porque en un territorio en que el 80% o más de lo que creemos protegido es de propiedad privada, esto va a acabar como el rosario de la aurora. Y que alguien sea propietario de algo no significa que pueda hacer con ello lo que quiera.

Yo quiero que eso me lo pregunten. No quiero que decidan por mi. Es mi futuro y quiero tomar parte en la decisión.


¿Quién está dispuesto a pagar 29 céntimos?

lunes, 14 de noviembre de 2011

LIC Río Agüeria




En Santalla de Ozcos el río Agüeria recorre buena parte del concejo en dirección contraria a la lógica de la cercanía del mar, pero siguiendo el imperativo de la gravedad desde la Sierra la Bobia, para tras un giro hacia el Este acabar en el Navia.




Es un río de caudal pequeño pero continuo, testigo de una ocupación ancestral de un territorio que hizo de la supervivencia un arte.

Varios senderos lo cruzan, lo siguen o acompañan más o menos de cerca, pero en sí mismo es un sendero, un camino bien marcado de conexión entre territorios en lo actualmente se llaman corredores de fauna o de biodiversidad.

Mantiene un bosque de ribera casi continuo que en buena parte se extiende también por las laderas adyacentes provocándose un paisaje curioso donde los bosques, de roble, de castaño, pinares de repoblación o alisedas ocupan los fondos de valle y las medias laderas, mientras que los pastizales se mantienen en lo alto de las sierras, planas casi todas ellas, llanas y adecuadas para el desarrollo de la ganadería. El resto son brezales infinitos más antiguos que los bosque que los rodean, con cortino dispersos que atestiguan tiempos donde los osos debían ser vecinos frecuentes.



En este otoño retrasado que disfrutamos, las orillas de Agüeria estaban este fin de semana plenas de colores, llenas de ocres y amarillos. Y las hojas cubrían discretamente ls cicatrices del uso de hombre de este río: molinos hundidos, pueblos abandonados hace décadas, restos de minas y canteras de pizarra, banzaos que ya no almacenan agua para las fraguas, canales y muros, corripias sin castañas.



Los bosques que rodean y esconden al Agüeria van recuperando poco a poco lo que es suyo, borrando los restos de la domesticación a la que lo sometieron los hombre y convirtie´ndose ahora en foco de expansión de la fauna y flora de los Ozcos.


No es de extrañar que toda la cuenca del río Agüeria sea Lugar de Interés Comunitario (LIC) y
el propio río, parte de las zonas núcleo de la Reserva de la Biosfera Oscos -Eo - Tierras de Burón. Y poca protección tiene para la que merece.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Los quebrantaosos

Mi primera impresión fue que no entendía nada.


Pero después ya empecé a comprender: es sencillo es una simple cuestión de dinero. Nunca importó el oso, ni el quebrantahuesos, ni por supuesto la conservación de la biodiversidad, ni nada por el estilo. Sólo importa la pasta, es este caso fondos Life por valor de 14 millones de euros.




Como es más de dos millones de euros (que son los fondos Life dedicados al osos actualmente en Asturias y alrededores) pues dejamos de proteger los osos, o lo que sea porque lo menos importante son los osos, y empezamos un nuevo proyecto fantasma, quimérico e inconsistente para disponer de nuevas remesas de pasta, que es lo importante.




Así que ahora en pago por los quebrantahuesos que hemos sacado de su hábitat e introducido a la fuerza sin avales científicos sólidos, en un medio donde los "jardineros del paisaje" siguen usando veneno, ahora cogeremos osos de una población aún inestable, escasa y en un leve proceso de evitar la extinción y los llevamos (los traslocamos) a un lugar nuevo donde no los quieren, donde les pegan tiros y también siguen usando veneno.




Es el pago de quebrantahuesos por osos o viceversa en un proceso de estupidez y publicidad sin fin, en el que lo único que cuenta es la pasta, lo de siempre.


Porque si lo que interesase mínimamente la naturaleza en Asturies, su biodiversidad, su conservación, otro urogallo nos cantaría.



Por cierto, en la prensa hablan de llevar dos osas y un macho. Podrían aprovechar a llevarse a Paca y Tola y a Furacu, total no creo que les interese repoblar, sólo los euros, y estos osos ya están amortizados.







lunes, 31 de octubre de 2011

Algo tuyo



Hace años había un anuncio televisivo sobre la prevención de incendios forestales que decía "Cuando el bosque se quema, algo tuyo se quema".


El sábado tuve ocasión de ver el desastre inmenso ocurrido en el Parque Natural de Fuentes, en los valles de los pueblos de Vega de Tallo, L'Artosa y Vega d'Hórreo. Un territorio enorme, que comenzaba a recuperarse y ha quedado reducido a cenizas.

Y tuve la sensación de que algo mío se había quemado.


Tal vez quede la esperanza de que esto sea un punto de inflexión, un antes y un después en la conciencia de los habitantes de un territorio que aún no han entendido que el fuego es un enemigo, no un aliado, que nunca se recuperarán si su futuro no pasa por conservar su tierra, sus paisaje, su patrimonio, sus bosques...



No pude ver el Valledor, el Valle del Oro que se ha convertido en el valle de la ceniza.

Os pongo un enlace. Es terrible.




domingo, 30 de octubre de 2011

¿Y esto para qué?



Un día estupendo, una ruta muy recomendable, un bosque hermoso y bien estructurado con árboles maduros, jóvenes, llenos de musgos y líquenes, distribuidos por especies según sus requerimientos ecológicos (orientación, tipo de suelo, pendiente...) y lógicamente en Asturies, modificado por el hombre según sus formas habituales, (talas y quemas sobre todo), pero que parecen haber respetado a este bosque en concreto (o a la parte que se conserva, claro). Es por cierto, un bosque de titularidad privada como amablemente se encargan de recordar en un panel informativo.



Pero a lo largo del camino, pero no en la misma pista necesariamente, se ven árboles que han sido parcialmente cortados, recortada su corteza con una pequeña hacha para secar al árbol ¡para secarlo!.



No había una pauta, ni más jóvenes ni más viejos, ni más cerca de la pista, ni en la vaguada, ni siquiera árboles enteros, a veces sólo ramas, en otros casos dos árboles juntos, en otros muy espaciados, sin seguir aparentemente líneas, nada.


Así que como no conozco explicación espero que alguien amablemente trate de darme una que tenga sentido.


Aprovecho para agradecer a aquellos que han contestado en otras ocasiones, quise hacerlo a través de los comentarios, pero a veces los ordenadores y yo no llegamos a entendernos.





Ahí van fotos de los árboles. Alguna estará desenfocada porque dentro del bosque hay poca luz.

domingo, 23 de octubre de 2011

Entrenamiento arácnido



En estos días soleados de este extraño y caluroso otoño, he podido observar algunos comportamientos un tanto extraños para la época del año. He visto prímulas floreciendo, petirrojos persiguiendo hembras y una cópula (o intento) de ánade real en el río Raíces. Pero el otro día me entretuve un rato observando el comportamiento de unas arañas diminutas en las que algunos machos buscaban cautelosamente a las dos o tres hembras que había entre unos juncos, en una zona encharcada junto a una pista forestal en Llaviana.



Las hembras eran considerablemente más voluminosas que los machos, no mucho más pequeños en longitud, pero evidentemente sí en el resto de parámetros.



Tal vez por ello los machos tenían mucha precaución al acercarse a las hembras, tanteaban el terreno y desde una distania prudencial hacían vibrar la tela donde estaba la araña con unos movimientos muy definidos que atraían la atención de la hembra, pero que no desencadenaban ataques.



Probablemente los movimientos que realizaba el macho tenían un ritmo o una cadencia especiales, muy diferentes de las vibraciones espasmódicas e irregulares que producen las presas al quedar atrapadas en la tela.



Un macho intentó acercarse a una hembra a la que estaba cortejando otro desde hacía un rato, así que fue rápidamente expulsado de la tela.

Pero no se fue muy lejos. Se puso a un lado de la tela, sobre otro junco, y comenzó a exhibirse frente a una mosca que estaba allí posada.




Levantaba el primer par de patas, hacía estiramientos rítmicamente, e incluso hacía vibrar, también con ritmo algunos hilos de tela que tenía cerca.

La mosca no parecía muy impresionada, así que se acabó marchando.




El macho después de haber entrenado, comenzó a acercarse de nuevo a la tela de la hembra donde el otro macho seguía intentando un acercamiento.

Tanteó el terreno y empezó a exhibirse. Algo hizo mal, porque la hembra se lanzó como una flecha contra él. Por suerte, el galán fue rápido y se dejó caer descolgándose por un hilo de seda.


Luego se fue hacia otro lugar más alejado.

Supongo que a entrenar más.

domingo, 16 de octubre de 2011

El falso otoño de Ventaniella




Ayer estuve en el Puertu Ventaniella, en la cabecera del río Ponga que originalmente era la cabecera del Sella, aunque con la apertura de la carretera del Pontón se le cambió el nombre. Jovellanos pasó por este puerto y explicaba que era el nacimiento del Sella, del mismo modo que el primer pueblo de Ponga entrando desde Amieva se llama Sellañu.

Disquisiciones históricas al margen Ventaniella es una maravilla: praderas de montaña, rodeadas de bosques de haya muy bien conservadas, una calzada medieval que aún se conserva en algunos puntos, una venta y una ermita en perfecto estado, leyendas, rutas de montaña, tranquilidad...


Ayer, 14 de octubre, el color de Ventaniella era otoñal, pero el otoño no había llegado a Ventaniella, el color era producto de la sequía que afecta a la Cordillera en estas últimas semanas. El color no era el brillo del las hojas otoñales, naranjas, amarillos, rojizos; era el color marrón de las hojas crepitantes por la sequía, y el paisaje estaba marrón, pardo, mustio.



Las hojas de los abedules sí estaban amarillas, lo que tampoco es extraño porque en la época de pérdida de hojas de los abedules en la franja superior del bosque es más temprana.


Pero las hayas están secas, no hay setas, hay agua pero poca y el pasto está ralo.




Eso sí, hay frutos, hayucos en abundancia, escaramujos, avellanas...


El otoño entrará con el agua, quizá comience a cambiar también el color de las hojas.




En la foto hay sólo un haya con color de otoño, anaranjado, el resto es el color de la sequía

domingo, 25 de septiembre de 2011

La muerte y la doncella


Con un macro en la cámara el mundo cambia radicalmente. La escala de tamaño cambia, pero la escala temporal también. Las cosas pasan tremendamente rápido, en menos de un segundo la araña pasó de estar esperando, inmóvil, al acecho, a cazar una mosca que se posó a su lado.



La araña es un tomísido un grupo llamado vulgarmente arañas cangrejo, que no cazan con telas si no al acecho. Probablemente sea una hembra de la especie Misumena vatia. En este caso su color blanco no resultaba útil como camuflaje porque estaba sobre una hoja, pero su inmovilidad sí.




Ya es extraño verlas a mediados de septiembre, pero se ve que estos días de calor atrasado han permitido alguna excepción a la norma.


Esta vez la muerte estaba radiante de color blanco y la doncella (creo que un sírfido) no tuvo opciones a lucirse ni a tratar de escapar.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...