Cuando leo que se van a realizar "mejoras" en casi cualquier aspecto de los espacios naturales protegidos de Asturies, me echo a temblar, pero cuando se trata de "mejorar" pistas de acceso ganadero, forestales, o en cualquier tipo de acceso fuera de las carreteras convencionales (e incluso en estas), entonces ya directamente me pongo a llorar.
El día de Nochebuena me fui a San Llaurienzu, el puerto que une Teberga y Somiedo. Había un viento endemoniado y no me atrevía a subir Camín de la Mesa adelante hacia Saliencia. No era plan de sufrir más de lo debido.
Así que bajé a la braña de Tuiza y allí me llevé la sorpresa de las obras entre Tuiza y el Rebel.lón, una braña preciosa sobre el valle de Teberga, con cabañas muy cuidadas y mucha actividad ganadera.
Las obras eran de mejora de la pista de uso ganadero: a temblar.
Firme de zahorra, con base de gruesos de granito (¿¡de granito!?, ¿no habrá descartes de piedra propia de la zona y no traer granito sabe Dios de dónde?) y (primer susto) ensanche de la caja.
Por principio, en los Parques Naturales de Asturies, se ha respetado la presencia de pistas (y se ha consentido la apertura de cientos de nuevas) y el arreglo de las mismas siempre respetando el ancho. Aquí no, se ha aumentado la caja de la pista y en algunos puntos se ha duplicado el ancho.
Y después llega lo habitual: basura y restos de obra por todos lados, desde latas de cerveza a restos de cuerda, cable, aceite...
Y luego la incompetencia. No tengo ni idea quién ha sido el ingeniero, pero se está luciendo. En la parte más complicada del camino donde un arroyo está erosionando rápidamente una franja de terreno más blanda, de pizarrilla, ya había problemas, pero ahora han puesto escollera, una abajo en la parte corta de la curva, y otra escollera en la alta, donde la ladera no estaba nada estable, y ahora directamente se cae.
Por último, por no alargarme, el papel mojado: la falta de respeto por los estudios de impacto ambiental y la legislación vigente, así como por el seguimiento de la obra en un espacio natural protegido (Parque Natural Ubiñas-La Mesa).
Se destruyen paredes, patrimonio etnográfico y se destruyen ejemplares protegidos, patrimonio natural. La pista invade tramos de terreno con Narcissus asturiensis, y entierra o arranca de raíz ejemplares de acebo o carrascu (Ilex aquifolium), lo cual es ilegal en cualquier caso y evidencia una forma de realizar las obras que mete miedo.
Sé que arrancar un acebo en una acebeda no será para tanto. No lo es y sí lo es. No lo es si estuviese justificado, pero no lo está, había alternativas. Y después está el cumplimiento de la ley. NO se puede exigir que se cumpla la ley a los paisanos de los pueblos, si las obras promovidas por la administración no la respetan. Después nos quejaremos.
Y si la "mejora" sirviese para mejorar el entorno.... Pero servirá para más furtivos, más incendios, más molestias a la fauna... Ah!, la fauna. Se me olvidaba. Es zona osera, con presencia segura de oso. Es obligatorio adecuar la obra a esta circunstancia, pero claro, sólo según la ley.
Un saludo y Feliz Año.